Durante el recorrido, la ministra Recalde resaltó la importancia de la implementación rigurosa de medidas de protección orientadas tanto a la seguridad de los operarios como al cuidado del medio ambiente, así como el funcionamiento de la Comisión Interna de Prevención de Accidentes (CIPA) en la empresa.

En la planta se desempeñan actualmente alrededor de 90 trabajadores, dedicados a la confección de distintos tipos de prendas e insumos hospitalarios, y proyecta la incorporación de otros 20 operarios para atender la expansión de la producción en el corto plazo.

La firma se distingue por colocar la salud y la seguridad ocupacional como ejes centrales de su gestión, lo cual resulta clave al representar marcas internacionales de alta exigencia. El cumplimiento de estrictos estándares en materia de seguridad laboral y ambiental resulta fundamentalmente para mantener la producción y la representación.

Según destacaron los directivos de Fénix S.A., en su última auditoría internacional, tanto la planta de Luque como la que opera en Lambaré obtuvieron el 100 % de los puntajes establecidos, posicionándose entre las mejores evaluadas de Sudamérica.